Claves del etiquetado nutricional para profesionales de la alimentación

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18/11/2025
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etiquetado nutricional de alimentos

El etiquetado nutricional cumple una función estratégica: más allá de indicar las calorías o los nutrientes que contiene un producto, la etiqueta nutricional garantiza la trazabilidad, el cumplimiento de la ley y la confianza del consumidor en los productos. Veamos para qué sirve el etiquetado nutricional, qué información debe incluir una etiqueta y cuál es la normativa que lo regula.

Qué es el etiquetado nutricional y para qué sirve

El etiquetado nutricional es la información que aparece en los envases o fichas técnicas de los productos alimenticios sobre su composición nutricional: calorías, grasas, hidratos, proteínas y sal, entre otros. Su objetivo principal es informar al consumidor sobre el valor energético y los nutrientes que aporta un alimento, ayudándole a tomar decisiones más saludables y conscientes.

Sin embargo, para un profesional del sector, el etiquetado nutricional cumple también otra función:

  • Garantizar la trazabilidad y la seguridad alimentaria de los productos manipulados o servidos.
  • Cumplir con las normativas vigentes sobre información alimentaria.
  • Facilitar auditorías sanitarias y controles oficiales.
  • Evitar sanciones derivadas de un etiquetado incompleto o incorrecto.

En otras palabras, el etiquetado nutricional no solo sirve para el cliente, sino que también es una herramienta técnica de gestión que protege tu negocio.

Qué información debe contener una etiqueta nutricional

Toda etiqueta con información nutricional debe incluir, como mínimo, los datos exigidos por la normativa europea y española. Estos datos pueden presentarse en una tabla o en texto, siempre con un formato claro, legible y fácilmente comprensible.

Información obligatoria

La etiqueta nutricional debe indicar, por cada 100 g o 100 ml de producto:

  • Valor energético expresado en kilojulios (kJ) y kilocalorías (kcal)
  • Grasas totales
  • Grasas saturadas
  • Hidratos de carbono
  • Azúcares (parte de los hidratos)
  • Proteínas
  • Sal (no sodio)

Además, puede incluir información por porción siempre que se indique claramente el tamaño de dicha porción.

Información adicional opcional

El fabricante o el profesional que elabore el producto puede incluir también:

  • Grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas.
  • Polialcoholes, almidón o fibra alimentaria.
  • Vitaminas y minerales, siempre que estén presentes en cantidades significativas.
  • Porcentaje de referencia de ingesta (IR o VRN).

Requisitos de formato

  • El tamaño de letra debe ser legible, con una altura mínima de 1,2 mm (excepto para envases pequeños).
  • El contenido nutricional debe aparecer en el mismo campo visual.
  • Las unidades deben seguir el formato oficial: kJ/kcal para energía y «g» para nutrientes.
  • Los datos deben referirse al producto listo para el consumo, teniendo en cuenta, si procede, la reconstitución o cocinado.

Normativa que afecta al etiquetado nutricional

El marco legal del etiquetado nutricional en España se basa principalmente en la legislación europea, que busca armonizar los requisitos para todos los Estados miembros.

Reglamento (UE) 1169/2011

Es la norma principal que regula la información alimentaria facilitada al consumidor. Establece qué alimentos deben llevar etiquetado nutricional (todos los envasados, salvo excepciones), qué datos son obligatorios, cómo deben presentarse y qué menciones son voluntarias o están prohibidas.

Real Decreto 126/2015

Desarrolla el Reglamento europeo en España y regula aspectos prácticos sobre el etiquetado, presentación y publicidad de los productos alimenticios. También define las competencias de las autoridades autonómicas para controlar su cumplimiento.

Real Decreto 1334/1999 (y modificaciones)

Aunque es anterior, sigue siendo una referencia en lo relativo a la etiqueta general de alimentos, complementando la normativa sobre información nutricional con aspectos de denominación, ingredientes y condiciones de uso.

Reglamentos complementarios

Existen además normas específicas para ciertos productos (como bebidas alcohólicas, alimentos dietéticos o suplementos) y para declaraciones nutricionales que sugieran propiedades benéficas o saludables, como el Reglamento (CE) 1924/2006.

Recomendaciones para un etiquetado nutricional claro y seguro

Implementar un etiquetado nutricional adecuado en tu negocio no solo implica cumplir con la normativa, también requiere organización y precisión. Estas son algunas recomendaciones para hacerlo correctamente.

Verifica tus fuentes de información nutricional

Si elaboras tus propios productos o menús, no basta con copiar valores genéricos: es necesario basarse en análisis de alimentos o bases de datos oficiales (como la BEDCA o informes de laboratorio). Esto garantiza que la etiqueta de información nutricional sea veraz y ajustada al contenido real.

Usa un programa o un servicio de análisis certificado

Existen herramientas digitales que calculan el valor nutricional a partir de recetas o fichas técnicas, pero en muchos casos (especialmente si vendes alimentos envasados) será necesario un análisis físico-químico realizado por un laboratorio autorizado.

Asegúrate de incluir los alérgenos

Aunque no forman parte estrictamente de la información nutricional, la declaración de alérgenos es obligatoria en cualquier alimento que se sirva o manipule. Los alérgenos deben estar siempre visibles y ser fácilmente accesibles.

Forma a tu personal en etiquetado e higiene alimentaria

El personal que manipula alimentos debe conocer tanto las bases del etiquetado nutricional y trazabilidad como las normas de higiene. Una formación actualizada evita errores y refuerza la seguridad alimentaria.

Mantén la coherencia con tu registro sanitario

Si tu empresa dispone de registro o autorización sanitaria, los productos que elaboras deben estar correctamente etiquetados y declarados según tu actividad. El etiquetado es una parte del sistema de autocontrol y APPCC (Análisis de Peligros y Puntos de Control Crítico), por lo que debe revisarse periódicamente.

Apuesta por la transparencia

Una etiqueta nutricional clara y completa genera confianza en los clientes y las autoridades. Además, cada vez más consumidores valoran los negocios que muestran información nutricional en menús, fichas de producto o plataformas online.

El etiquetado nutricional no es un simple trámite burocrático: es una garantía de calidad y seguridad para tu negocio. Cumplir con la normativa no solo evita sanciones, sino que mejora la imagen de tu marca, optimiza los controles sanitarios y aporta un valor añadido al cliente final. Así que si necesitas asesoramiento o tienes alguna duda, ¡contacta con Traza!

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Vicente de Pablos es Licenciado y Doctor en Veterinaria y Licenciado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos.
Profesional especializado en el ámbito de la Seguridad Alimentaria y la Salud Pública